
¿Cómo comprar una moto de segunda mano?
Decantarse por comprar una moto de segunda mano es una acertada decisión. Como cualquier otro vehículo, su precio es mucho menor cuando ya ha sido usada y, en ocasiones, hasta nos puede durar tanto como una moto nueva. Sin embargo, todos hemos oído casos que nos demuestran que no siempre se gana con este tipo de adquisiciones.
El éxito de la compra depende, en gran medida, de conocer y realizar las comprobaciones necesarias antes de tomar una decisión. Por eso, hoy queremos darte algunos consejos y orientarte en la compra de este tipo de vehículos.
Pero, antes de eso, queremos recordarte que, si ya has tomado la decisión de comprar una moto, deberás proteger tu nueva adquisición. Es muy importante que cuentes con un seguro, incluso antes de recoger tu nuevo vehículo porque puede que el anterior propietario ya haya dado de baja su póliza.
En iSeguros somos especialistas en el sector de los seguros para particulares y empresas. Visita nuestra página web, consulta nuestras pólizas o comprara, sin ningún tipo de compromiso, el contrato de tu póliza actual.
Comprar una moto de segunda mano: ¿Tienda o particular?
Uno de los grandes dilemas a la hora de adquirir una moto de segunda mano es si comprarla en una tienda especializada o directamente a un particular. Desde iSeguros creemos que ambas opciones tienen ventajas y desventajas. Veamos cuáles:
- Las tiendas tienen la obligación legal de establecer una garantía, normalmente de dos años. Sin embargo, algunas declaran la operación como una simple “comisión de venta”. Es decir, la venta se realiza entre propietarios y el establecimiento no es dueño del vehículo, simplemente se declara encargado de realizar la gestión. De esta manera, no tiene la obligación de ofrecer garantía.
- Si compras la moto en una tienda, siempre podrás acudir al establecimiento para realizar cualquier tipo de reclamación. Contactar con un particular normalmente resulta más difícil ya que, una vez realizada la venta, suelen desaparecer rápidamente.
- Por otro lado, una tienda conoce perfectamente la documentación necesaria para transferir un vehículo. Sin embargo, cuando el trato es entre particulares, debe ser el comprador quién se encargue de realizar este trámite.
- Los particulares no tienen la obligación legal de ofrecer garantía, aunque ésta se puede negociar. En este caso, es recomendable dejar por escrito cualquier pacto. También existen garantías externas, que pueden ser contratadas por particulares a través de una compañía aseguradora especializada.
- Como comentamos, aunque no existe esta obligación entre particulares, es importante recordar que el comprador tiene un máximo de 6 meses para reclamar ante los tribunales “vicios o defectos ocultos” de la motocicleta.
- Otra de las ventajas de comprar una moto de segunda mano directamente a un particular es que su precio suele ser menor, ya que la tienda debe cobrarse un margen de beneficio por la venta. Por otro lado, el propietario puede ofrecernos datos útiles sobre la vida y el uso de la moto que el vendedor de una tienda desconoce.
Revisa la documentación
Antes de comprar una moto de segunda mano, deberías revisar su historial. El informe, que puedes solicitarlo a la Dirección General de Tráfico, te ofrecerá el número de titulares que ha tenido el vehículo, si ha sufrido embargos, si es robado, las ITV que ha pasado y su resultado, las lecturas del cuentakilómetros…
Debes recordar que, normalmente, los gastos asociados con el cambio de nombre de un vehículo suelen ir a cargo del comprador. Por ello, aunque realices la compra en una tienda, te recomendamos que consultes quién se hará cargo de ello.
Por otro lado, la documentación necesaria para transferir la moto está compuesta por:
- La ficha técnica, que debe estar en vigor.
- El permiso de circulación
- El recibo del impuesto municipal del último año
- El DNI del vendedor
- Un contrato firmado por el vendedor y el comprador
Puedes realizar la transferencia directamente o a través de un gestor. Encargar esta tarea implica, obviamente, pagar honorarios, pero puede ahorrarte el tiempo de haber de realizar los trámites en la administración. Además, un gestor puede asesorarte en los diferentes trámites y documentos necesarios.
Si, por el contrario, quieres realizar el trámite tu mismo, debes revisar la documentación completa, buscar los formularios de tráfico y, una vez rellenados y firmados, debes depositarlos en Hacienda, donde tienes que abonar un 4% del valor de la moto que figura en sus tablas. Posteriormente, debes solicitar a tráfico la transferencia.
Recomendaciones para revisar una moto de segunda mano antes de comprarla
Evidentemente, antes de decidirte por una moto, la deberías revisar a fondo. Aunque no seas un experto, puedes realizar una serie de básicas comprobaciones. Te explicamos cómo hacerlo a continuación. Además, también es recomendable que consultes el estado del vehículo con un mecánico.
Kilometraje
Evidentemente, el número de kilómetros de una moto es uno de los factores más relevantes. De todas maneras, conocer ese dato no es determinante, puesto que hay motores de gran calidad y que, aunque acumulen cifras elevadas, pueden durar muchos más años que una moto con pocos kilómetros pero con un motor mal cuidado.
Por otra parte, no podemos confiar 100% en la cifra que aparece en el cuadro de instrumentos. Aunque es ilegal, puede que el cuentakilómetros de un vehículo esté manipulado.
Estado de los frenos
Para conocer el estado de los frenos, primero de todo, deberás fijarte en el desgaste de las pastillas. Después, deberás comprobar el estado de los discos. Simplemente pasando un dedo por la superficie podrás ver si hay surcos. Si se encuentran en buen estado, su tacto debería ser liso y uniforme.
Si el líquido de frenos es oscuro, querrá decir que es viejo o que lleva mucho tiempo sin usarse. ¡Cuidado con las motos que han estado mucho tiempo paradas! Volver a poner en funcionamiento una moto en la mayoría de las ocasiones implica tener que realizar una serie de reparaciones. Suele ser habitual que las baterías pierdan su carga, que los neumáticos se deformen, que las gomas se agrieten, que los manguitos pierdan sus propiedades…
Estado de los neumáticos
Uno de los elementos más importantes y más fáciles de comprobar son los neumáticos. Debes revisar su dibujo para saber el grado de desgaste y si se deben cambiar en poco tiempo. En caso de que necesiten ser sustituidos en breve, lo más justo será negociar el precio de la moto.
Su estado nos puede dar información sobre el uso que se ha dado a la moto. Por ejemplo, si una moto deportiva ha sido utilizada en circuito, las gomas estarán más desgastadas por los flancos. En cambio, el desgaste inverso indicará que la moto ha rodado más en línea recta.
Golpes o caídas
Con el objetivo de descubrir posibles golpes o caídas antiguas, podemos prestar atención a los retrovisores, estribos y palanca de cambios, ya que normalmente son los elementos más expuestos a sufrir daños cuando entran en contacto con el suelo o chocan con otros elementos.
Si se encuentran en mal estado, pueden indicar que la moto ha sufrido algún incidente. Se debe tener en cuenta que una vieja caída o golpe, puede provocar averías y que el reemplazo o reparación de alguno de estos elementos puede ser elevado.
Estado del motor
Los problemas en el motor son difíciles de detectar ya que normalmente se encuentran en su interior. Si no eres un gran entendido en mecánica, es probable que se te puedan pasar por alto ciertos errores. Sin embargo, sí que podemos comprobar posibles pérdidas de fluidos, tornillos en mal estado o visibles golpes que nos indiquen una caída. Además, debemos tener en cuenta que un motor excesivamente sucio puede esconder pequeños desperfectos.
Por último, te recomendamos escuchar el motor arrancado. Cualquier sonido extraño puede anticipar un fallo. Por ello, ante la mínima duda, consulta con un mecánico.
Amortiguación
Por último, te recomendamos que revises la suspensión. Se trata de un elemento al cual no solemos prestar demasiada atención, pero no por ello deja de ser importante que se encuentre en perfecto estado. Para comprobarlo, simplemente debes comprimir y soltar en repetidas ocasiones la parte delantera y trasera de la moto. Los rebotes indican un alto grado de desgaste.
…¡Y hasta aquí nuestras principales recomendaciones! Esperamos que te sean de mucha utilidad y que contribuyan a tomar buena decisión. Te deseamos mucha suerte en la compra de tu nueva moto.